Ley de Bode.
No se trata en absoluto de una ley, se
parece más a un truco a uno que tampoco funciona siempre. Y no la
inventó Bode. Pero la ley de Bode, que así se llama, ha jugado un papel
importante en el descubrimiento de asteroides e incluso de planetas.
Sería
difícil encontrar en la actualidad un científico que considere la
fórmula de Bode una ley inmutable de la naturaleza. Y sin embargo
tampoco ha sido tajantemente descalificada.
Por razones que nadie sabe explicar, no ha sido mala predictora.
La
ley de Bode consiste en una predicción de la distancia que existe entre
un planeta y el sol. Consiste en una sucesión de números
(0,3,6,12,24,48,96,192...) los cuales se utilizan para suponer éstas
distancias, pero el calculo es preciso en la mayoría de los planetas.
Plutón es el único que no coincide con esta Ley por mucho.
La ley
de Bode no ha sido descartada, su función es ayudar a buscar planetas,
si no están seguros de la existencia de un planeta en un sistema solar,
se apoyan en esta Ley para llevar a cabo la búsqueda.
En lo
personal esto no es una Ley ya que no puede ser verificada, lo que si se
sabe, es, que no es exacta con cada uno de los planetas y esto es
suficiente para descartarla como tal.
Las leyes de la ciencia, constantemente se someten a prueba mediante la observación de hechos naturales o experimentos.
El
conocimiento sobre los sistemas planetarios extrasolares no es total y
probablemente esté lleno de errores de selección (observamos solamente
los planetas más corpulentos y más próximos a la estrella). Entonces, de
cualquier modo ¿es válido aplicar en estos sistemas una ley tan
controversial como la de Titus-Bode? ¿Cuáles son los márgenes de
incertidumbre en semejantes intentos? ¿Ha habido otros intentos, con
otros sistemas extra solares, que hayan puesto a prueba la Ley de
Titius-Bode?
El sistema de 55 Cancri es el más numeroso que se
conoce actualmente, y es lógico que después del éxito de este sistema
intentemos verificar su validez en otros sistemas planetarios
extrasolares múltiples conocidos.
Opino que tiene que existir un
fundamento físico. A final de cuentas, el Sistema solar es un sistema
físico y todos los fenómenos presentes en él, incluida la Ley de
Titius-Bode, deben tener una explicación física. Podría ser que el
patrón de la distribución de las distancias planetarias del Sistema
solar sea único y que no exista ninguna situación análoga en todo el
universo: en tal caso, la Ley de Titius-Bode sería válida sólo para el
Sistema solar, pero aún así tendría que tener una base física.
Podría
ser que en algunos casos la Ley de Bode si aplica, pero ya estamos muy
avanzados en tecnología y es preferible usarla, tomando como punto de
partida la ley de Bode.
Para completar esta historia podemos ver
que los astrónomos han encontrado sucesiones similares a la Ley de Bode
en algunos de los satélites de Júpiter, cuyas distancias a Júpiter
siguen una sucesión de comportamiento similar a la de los planetas del
sistema solar, aunque con coeficientes distintos; también se comportan
así los cinco satélites principales de Urano: Miranda, Ariel, Umbriel,
Titania y Oberón, y en Saturno los satélites se ajustan en distancia a
una ley similar a la de Bode, pero con huecos entre algunas órbitas.
El
universo no se rige tal y como a la lógica humana le puede gustar. Es
posible que en un futuro se encuentren más respuestas sobre el origen de
la Ley de Bode y por qué funciona en la mayoría de los casos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario